Para: Guti

Hoy quiero escribirte a ti. Aunque no lo creas, eres la persona que hizo mis vacaciones más divertidas e interezantes. Pero compartir contigo un tema de conversación no era lo mejor de la semana, eran tus besos los que me alegraban día a día. Diariamente, mis mejillas tenían que estar selladas por ti y así era felíz porque sabía que estabas allí. Hasta ahora cuando te veo y me saludas con un beso, este me llega hasta el alma y me ilumina el día entero. Pero ... cómo empezó todo esto? Todos los días eras un chico más, desparramado y sin ganas de estar en el lugar que estabas, nada que me llame la atención. Hasta que un día conocí tus verdaderos colores brillando al rededor de mi ser: tu inteligencia. Fue en ese momento que me quede totalmente ciega y mi persepción de tu existencia cambió radicalmente. Pasaste a ser una persona importante para mi y quería escucharte hablar todos los días de mi vida porque en cada frase tuya estaba la escencia de un joven culto; no florero, sino CULTO con sus 5 letras bien puestas. Para mi era la razón suficiente para que atraigas mi atención y así fue. Tu alma bohemia llena de experiencias me gustaba cada día más. Y así pasé dos meses de mi vida, tiempo en el cual aprendí muchas cosas sobre mi y que son las concluciones de este post: Conjuro para volver a Carli totalmente ciega: full inteligencia, mil libros, linda mirada, besos ricos en la mejilla, una pizca de indiferencia y una banda de rock. Te admiro! eres, en parte, lo que quiero llegar a ser. Te dejaré una canción que sé que te gusta, pero la verdad es que lo más profundo de mi ser no quiere que leas esto nunca.